
Papa Francisco ha sido sepultado. En la vida, en la muerte y en la eternidad junto a la Santísima Virgen María
El Cardenal Rolandas Makrickas, coadjutor de la basílica papal de Santa María la Mayor, a quien el propio Francisco pidió encargarse de su entierro junto a la Salus Populi Romani: "Quería que su tumba hablara de su vida".