
por Portaluz
1 Septiembre de 2025La Asociación Internacional de Exorcistas (AIE) ha difundido el 1 de septiembre de 2025 un comunicado de prensa para denunciar como un engaño soez la afirmación -difundida por algunos pasquines digitales y replicada en redes sociales- de que los exorcistas católicos cobran dinero por cada sesión de exorcismo que realizan.
A continuación, la publicación de la AIE:
La "noticia", o mejor dicho: el "bulo", ha estado circulando desde al menos 2017. Y no citaremos su fuente primaria, ni su recuperación "autorizada" en Italia, ya que es más apropiado correr un velo lastimoso sobre ella. En resumen: los exorcistas de una nación más allá de los Alpes -según los medios transalpinos e italianos- ganarían hasta 12 mil euros al mes, 500 euros por sesión. En definitiva, una profesión muy lucrativa: directiva, podríamos decir. Lástima que esto no se corresponda con la verdad y que, como suele suceder en la época del "copiar y pegar" información, esta patraña se haya extendido desafiando no tanto cualquier negación, sino el mismo sentido común o ese rigor de lógica que uno esperaría de ciertas redacciones ilustradas o ilustradas. Y así no solo nació, sino que se consolidó, el "mito" del exorcismo pagado y lucrativo, tanto en el extranjero como en Italia. Finalmente, un cierto "periodismo", para darse un barniz de credibilidad, llega incluso a citar a la Asociación Internacional de Exorcistas como su fuente. En cambio, la realidad es muy diferente y debe seguir siéndolo: es decir, la gratuidad absoluta del ministerio exorcista.
Obviamente, estamos hablando de exorcismos regulados por la Iglesia Católica y administrados por sacerdotes católicos nombrados para este servicio por sus respectivos Obispos con una licencia especial y expresa (cf. c. 1172 del Código de Derecho Canónico). En cuanto a lo que hacen otros autodenominados exorcistas pertenecientes a otras realidades más o menos religiosas, más o menos esotérico-ocultistas, o más o menos fraudulentas, corresponde a diferentes entidades juzgarlo, empezando por la Policía y el Poder Judicial.
Por lo que se refiere a la Iglesia católica, como recuerdan las "Orientaciones para el ministerio del exorcismo", las oraciones de curación y liberación, como la acción pastoral del exorcismo, son y deben ser liberadas de cualquier forma de ofrenda monetaria, para poner de relieve la gratuidad de los dones del Señor. Ningún creyente, de hecho, debe encontrar obstáculos o límites para beneficiarse de la gracia divina, ni debe sentirse obligado a pagar una "tarifa" por la acogida y la escucha recibida de un sacerdote exorcista. De aquí deriva también el vivo consejo de rechazar cualquier ofrenda gratuita para poner en práctica las palabras del Señor:
"Recibisteis gratis, dad gratis" (Mateo 10:8).
¿Será suficiente esta aclaración nuestra para negar tanto cualquier noticia infundada como su renovada difusión?