Exorcista advierte contra la tentación demoníaca de buscar la "gracia barata"

En su última publicación web el sacerdote y exorcista norteamericano Stephen Rosseti reflexiona sobre cuán arduo es "librarse de la influencia de Satanás" y al iniciar su argumentación, recuerda la afirmación del teólogo Dietrich Bonhoeffer quien su libro "El costo del discipulado",  señala que "no hay gracia barata".

El erudito Bonhoeffer -quien fue asesinado el año 1945 en el Campo de Concentración nazi de Flossenbürg- fue enérgico al advertir sobre esta tentación demoníaca en el citado libro...

La gracia barata es el enemigo mortal de nuestra iglesia. Es gracia sin precio ¡Gracia sin costo! ... La gracia barata es la predicación del perdón sin requerir arrepentimiento, el bautismo sin disciplina eclesiástica, la eucaristía sin confesión de los pecados... La gracia barata es gracia sin seguimiento de Cristo, la gracia sin cruz, la gracia sin Jesucristo, vivo y encarnado.

A veces -reflexiona el exorcista Rossetti- las personas en el mundo de hoy caen en la trampa de esperar que Dios las arregle cuando no están dispuestas a hacer el trabajo duro que es necesario... es decir, gracia barata. Y Rossetti no teme ser explícito y con duras palabras denuncia esa inconsistencia de vida... 

"Por ejemplo, más de unos pocos con adicción a la pornografía se quejan de que han orado y orado para que Dios se la quite, pero no lo ha hecho. Cuando les pregunto si, además de la oración y la confesión, han ingresado a un programa de recuperación católica en línea y lo han trabajado, casi invariablemente dicen que no. Si les pido algún paso concreto que hayan intentado, la lista es muy corta. Aparentemente no están dispuestos a hacer los sacrificios radicales y participar en las fuertes disciplinas necesarias para ser liberados. En contraste, conozco a un seminarista que tuvo un problema con la pornografía en Internet, por lo que renunció por completo a tener un teléfono celular. ¡Este es un verdadero sacrificio en la cultura actual y un buen comienzo!"

El exorcista señala que también muchos de quienes se quejan de ser acosados por demonios, afirmando que han rezado y rezado sin éxito, no han abordado todos los cambios de comportamiento personales necesarios. "Esto a menudo incluye participar en un duro trabajo terapéutico interno; enfrentar y sanar los traumas internos del pasado. Sabemos que la liberación rara vez tiene éxito cuando hay heridas traumáticas internas graves no abordadas y no sanadas. Por otro lado, cuando alguien viene a nosotros en busca de un exorcismo después de años de arduo trabajo personal en psicoterapia y vida santa, el proceso de liberación suele ser bastante corto y exitoso", señala Rossetti. 

Otros, prosigue el sacerdote, estando plagados de demonios por años pretenden tener soluciones rápidas y fáciles. Acusan incluso de que el exorcista es ineficaz, no queriendo atender a la realidad que exige abnegación para dar la lucha contra el mal. "Pueden pasar años de oración, sacrificio, disciplina espiritual, abnegación y sufrimiento antes de que ocurra la verdadera liberación. En algunos casos pasados, después de décadas de practicar el ocultismo, se necesitaron cuatro o cinco años de intenso trabajo antes de que la verdadera libertad comenzara a sentirse", afirma Rossetti. 

No hay "gracia barata". El proceso de librarse de la influencia de Satanás y de la purificación completa en Cristo es arduo. Requiere perseverancia y una confianza creciente en Jesús. "Todo esto es para nuestro beneficio. Lo que Dios realmente está haciendo es purificarnos para estar en su presencia santa, amorosa e infinita en la próxima vida. Unos pocos años de arduo trabajo son poco a la luz de una eternidad con Él", concluye el exorcista.