por Portaluz
17 Octubre de 2025En un video breve el relato de este joven español es un ejercicio para sincerar la conciencia, reconocerse y alentar a quienes hoy se encuentren allí donde él, Vicent, nos cuenta que estuvo...
"Vas creciendo, empiezas a salir de fiesta. Te gustan las chicas, empiezas con el alcohol... Es verdad que ahí te empiezas a distanciar de Dios. Porque claro, al final, dejas de ser coherente. Porque dices: «oye, quiero salir con mis amigos, y beber y fumar un canutito (porro) y tal», pues no es coherente con que luego digas «Es domingo, voy a misa». Si que sigues creyendo en Dios, sabes que está ahí, pero claro, la situación se vuelve incoherente. (...) Esto al final te funciona dos o tres veces, pero a la cuarta ya te da más pereza confesarte, a la quinta dices «¿ya para que voy a misa?», y te vas alejando".