
4 Marzo de 2025
Un comunicado emitido el 4 de marzo por la Presidencia de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea subraya que la lucha de Ucrania por la paz "también será decisiva para el destino de Europa y del mundo".
El mensaje reafirma el continuo apoyo de los obispos de la Unión Europea a Ucrania y a su pueblo, "que ha estado sufriendo la injustificable invasión a gran escala de Rusia durante más de tres años".
Un destino que se extiende más allá de las fronteras
La Presidencia de la Comisión comparte sus oraciones continuas por aquellos que han muerto, aquellos que están heridos o luchando por su país, y aquellos que han sido desplazados como resultado de la guerra.
La declaración también expresa su gratitud a los responsables de la toma de decisiones de la UE por "proporcionar un apoyo humanitario, político, económico, financiero y militar sin precedentes a Ucrania y a su pueblo en los últimos años".
Más que simplemente describir su sentimiento, los obispos utilizan la declaración para destacar cómo el destino de Ucrania se extenderá mucho más allá de sus fronteras y, en cambio, afectará al mundo entero.
Un nuevo capítulo de la guerra
Reconociendo las "complejidades geopolíticas y la imprevisibilidad de las acciones" de algunos países, los obispos piden a la UE y a sus Estados miembros que "permanezcan unidos en su compromiso de apoyar a Ucrania y a su pueblo".
Tras el tercer aniversario de la invasión a gran escala de Rusia, la Comisión califica el ataque como una "violación flagrante del derecho internacional" y señala que los actos cometidos contra civiles durante este tiempo "exigen una consecuente búsqueda de justicia y rendición de cuentas".
Cómo debería ser la paz
Esta rendición de cuentas vendría en forma de una paz integral, justa y duradera en Ucrania. La declaración explica que esto solo puede lograrse a través de negociaciones, respaldadas por la solidaridad global, e incluyendo a Ucrania en las discusiones. Los obispos de la UE "rechazan firmemente cualquier intento de distorsionar la realidad de esta agresión".
La paz debe estar en consonancia con el derecho internacional y debe crear el entorno necesario para permitir que las familias ucranianas se reúnan y "vivan una vida con dignidad, seguridad y libertad en su patria soberana e independiente".
Sin embargo, los obispos también subrayan la importancia de proteger los derechos de todas las comunidades, "incluida la minoría rusoparlante". Esto debería ser parte de la reconstrucción de la infraestructura de Ucrania y "Rusia, el agresor, debe participar adecuadamente en este esfuerzo". Debe ser una paz creada a través de la cooperación y la solidaridad internacionales.
Los obispos no dudan en animar a la UE a seguir adelante con la incorporación de Ucrania como Estado miembro de "manera oportuna y justa". La Comisión de Obispos de la UE expresa su esperanza de que la Unión Europea siga viviendo su vocación de promotor de "paz y ancla de estabilidad para su vecindad y para el mundo".
Mientras los cristianos se preparan para el comienzo de la Cuaresma el 5 de marzo, los obispos confían Ucrania y Europa a Jesús a través de la intercesión de María, la Reina de la Paz.
Fuente: VaticanNews.va