¿Un monopatín en una exposición de arte sacro? El testimonio de un cristiano valiente en "Las Edades del Hombre"

¿Un monopatín en una exposición de arte sacro? El testimonio de un cristiano valiente en "Las Edades del Hombre"

"Ignacio fue valiente en todo. Fue valiente en el último acto de su vida contra los terroristas. Pero antes fue valiente al defender, por ejemplo, su fe en la universidad, lo que le costó que lo suspendieran un año... y un año más de estudio"

Portaluz. Luis Santamaría del Río

23 Octubre de 2025

El 16 de octubre se ha inaugurado en Zamora (España) una nueva edición de Las Edades del Hombre, una iniciativa de la Iglesia católica en las diócesis de la región de Castilla y León para mostrar el patrimonio artístico religioso que comenzó en 1988. Con ésta, son ya 28 las ocasiones en las que se han abierto las puertas de catedrales, monasterios y santuarios que se han transformado durante unos meses en exposiciones de fe y belleza.

La muestra que acaba de abrirse en la ciudad bañada por el río Duero antes de llegar a Portugal lleva el título de "EsperanZa", aludiendo al año jubilar que vive la Iglesia y a la realidad dura de despoblación y recientes incendios, entre otros problemas, de la tierra que acoge la exposición. Podrá visitarse en la Catedral de Zamora tras pasar por la introducción en la iglesia románica de San Cipriano, también en el casco histórico de la ciudad.

Como novedad significativa, en esta ocasión se ha dedicado otro templo muy cercano a la Catedral, la iglesia -también románica- de San Isidoro, como "el punto destinado a la divulgación, especialmente la dedicada a los visitantes en edad escolar". Allí los más jóvenes, y todos los que lo deseen, podrán contemplar ejemplos palpables del sufrimiento humano y, como respuesta, lo que la fe cristiana ha plasmado en el arte sacro.

Símbolo de entrega y de esperanza

monopatin de ignacio echeverria

Algo que sin lugar a duda llamará la atención es la presencia de un monopatín (la típica tabla de skateboard). ¿Qué tiene que ver con el sufrimiento o con la religión?, pueden preguntarse muchos. Por eso hay que detenerse a leer la explicación: se trata de un objeto cedido temporalmente a Las Edades del Hombre por el Museo Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, que está en la ciudad de Vitoria.

¿Y de quién era? Precisamente de alguien a quien se ha denominado "el héroe del monopatín": Ignacio Echeverría, un joven español que fue asesinado en los atentados yihadistas de Londres del 3 de junio de 2017 después de una acción heroica: mientras pasaba por el puente sobre el río Támesis con su monopatín, al encontrarse en medio del suceso, fue capaz de salvar con su monopatín a dos personas. Tenía 39 años.

Ignacio perteneció a la Acción Católica antes de ir a trabajar al Reino Unido. "Era un joven normal que rezaba, se confesaba, venía a Misa, le gustaba el monopatín...", recuerda uno de los sacerdotes de su parroquia en Las Rozas (Madrid), Daniel Sevillano. Su acto heroico, según las personas que lo conocían, fue perfectamente explicable por su fe.

Recientemente la programación radiofónica de la diócesis anfitriona de la muestra dedicó un espacio a este joven, que comenzó con unas palabras del comunicador Sergio Cruz, quien destacó que la acción de Ignacio Echeverría "trascendió fronteras, provocó una ola de admiración y abrió caminos de reconocimiento civil y eclesial", razón más que suficiente para incluir su monopatín en Las Edades del Hombre "como símbolo de entrega y esperanza".

"Era bueno porque quería ser bueno"

El primero de los testimonios recogidos por Cruz fue, precisamente, el de Joaquín Echeverría, padre de Ignacio, que describe a su hijo como "un hombre bueno, un hombre inocente con esa inocencia que supone no envidiar a los demás, admirar lo que considera admirable en los demás e intentar mejorarse él mismo en los aspectos que consideraba importantes y apreciaba que tenía carencias".

Porque la santidad -que es a lo que debe tender la vida cristiana- no significa perfección. Toda persona tiene sus defectos. Cuando Joaquín habla de su hijo afirma que Ignacio "era bueno porque quería ser bueno, y eso le hacía analizar sus conductas y sus carencias para no repetir cosas que había hecho que consideraba inadecuadas y para, a través de su esfuerzo, perfeccionarse en lo posible".

La causa de beatificación, en marcha

oracion ignacio echeverria

Preguntado por la causa de beatificación del joven, Joaquín Echevarría relata cómo "monseñor don Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid, nos sugirió a los padres de Ignacio que hiciéramos una causa de posible canonización. Él me dijo: 'yo creo que Ignacio puede ser un magnífico ejemplo para todas las personas y, en particular, para los jóvenes. Y quién mejor que la familia para ayudar a que su presencia en la sociedad sea útil, sea un referente también de los católicos en este momento'".

Se trata de un proceso que comenzó en el primer semestre de 2023, cuando una asociación creada al efecto asumió la responsabilidad de constituirse como promotora de la causa de beatificación de Ignacio, solicitando la competencia para la archidiócesis de Madrid, lugar de origen del joven héroe, ya que no fue el lugar de su muerte. 

Superado este paso, y después de recopilar lo dicho por muchas personas que lo conocieron y otras que consideran que han sido escuchados por Dios tras dirigirse a él por intercesión de Ignacio, "el postulador ya tiene suficientes testimonios para iniciar la causa", según revela ahora su padre, que añade: "entiendo que se entregará el expediente a lo largo del mes de octubre".

Un mensaje de valentía frente al miedo

pasion

Otra persona muy conocedora de la figura de Ignacio es el profesor de Religión Javier Segura, autor del musical "Skate Hero" y delegado diocesano de Enseñanza en la diócesis de Getafe, quien también participó en el espacio radiofónico. ¿Cuál es el legado del joven fallecido? Su respuesta es directa: "para mí, el principal mensaje que Ignacio Echeverría puede lanzar a los jóvenes de hoy, y también a toda la sociedad, es un mensaje de valentía".

Y lo desarrolla así: "yo creo que estamos en un mundo en el que el miedo nos atenaza, nos paraliza y, de hecho, está siendo utilizado como un arma para que nadie diga, para que nadie hable, para que los valores cristianos muchas veces sean silenciados, para meter lo religioso en una sacristía y que no salga de ahí".

En este contexto, cabe destacar que "Ignacio fue valiente en todo. Fue valiente en el último acto de su vida contra los terroristas. Pero antes fue valiente al defender, por ejemplo, su fe en la universidad, lo que le costó que lo suspendieran un año... y un año más de estudio", tal como recuerda Segura. 

Echeverría también "fue valiente al defender las raíces cristianas de Europa en Internet. Fue valiente con sus amigos. E incluso marcando un estilo que hizo que se quedase fuera en otros ámbitos". En definitiva, según Javier Segura, el conocido como héroe del monopatín "fue valiente en todo momento y ese es, yo creo, el mejor legado que podemos asumir hoy: la valentía de Ignacio".

Un ejemplo de entrega para todos

Imagen gentileza de Tom Garritty.
Imagen gentileza de Tom Garritty. Unsplash

También tomó la palabra en el programa radiofónico el obispo de Zamora, monseñor Fernando Valera, subrayando la importancia de exponer un objeto tan poco artístico como una tabla de skateboard en una muestra patrimonial tan prestigiosa. "Este monopatín nos recuerda que en la vida se puede ser un héroe porque esta vida se entrega. Y este joven lo hizo por gente a la que no conocía, pero fue capaz de darse y entregarse, ofrecer lo más hermoso que tenemos de nosotros mismos".

El prelado se refiere a Ignacio Echeverría como "un muchacho joven, un muchacho profundamente cristiano, alguien que se fiaba de Jesús, que le gustaba el deporte, que era buen amigo de sus amigos, que trabajaba con mucha ilusión. Un hombre, un muchacho, un joven que ha sido un ejemplo para todos nosotros".

Por eso, monseñor Valera insiste en su convencimiento de que "ver este monopatín nos invite en estas Edades del Hombre a ser jóvenes para los demás, entregados, alegres. Hombres, chicos y chicas, capaces de dar y darse".

Testimonio de la fuerza transformadora del Evangelio

restos ignacio echeverria

En la conclusión del espacio radiofónico dedicado a Ignacio Echeverría, Sergio Cruz señalaba que, tras haber escuchado "la voz de su padre, la mirada de quienes han llevado su historia al arte y la reflexión del pastor de esta diócesis", los tres testimonios "convergen en una misma verdad: Ignacio Echeverría nos recuerda que la generosidad y el valor siguen teniendo sentido en un mundo que a menudo gira en torno a la inmediatez y al interés propio".

Efectivamente, "su ejemplo nos invita a detenernos a mirar al otro y a descubrir que la verdadera grandeza se encuentra en servir y amar". Su gesto heroico, "nacido de un impulso de fe y de amor desinteresados, sigue inspirando a jóvenes, a familias y a comunidades, recordándonos que cada vida puede convertirse en luz cuando se entrega por los demás".

Éste es el verdadero sentido de tener un monopatín en la iglesia de San Isidoro, un templo muy cercano a la Catedral de Zamora, donde "va a permanecer expuesto como testimonio de esperanza, de compromiso y de la fuerza transformadora del Evangelio". El último deseo expresado por el comunicador zamorano es el de "que el ejemplo de Ignacio Echeverría siga hablándonos al corazón y nos anime a vivir con entrega, con confianza y con amor al prójimo".