El 26 de abril de 2022, en el caso "M.A.M. contra Suiza", el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha dejado sentado el postulado de que quienes se convierten del islam al cristianismo corren un grave riesgo de ser perseguidos en Pakistán y tienen, en principio, derecho de asilo.
La decisión es significativa porque se refiere a un caso de la llamada conversión "sur place", es decir, que se produjo después de que los solicitantes de asilo abandonaran su país de origen. M.A.M. abandonó Pakistán porque se sentía en peligro debido a una venganza que implicaba a su familia y a una familia de vecinos, lo que, según las autoridades suizas y el Tribunal Europeo, no justificaría el asilo.
Sin embargo, tras llegar a Suiza, M.A.M., de religión musulmana, se convirtió al cristianismo y se unió al Ejército de Salvación. Las autoridades y los tribunales suizos estuvieron de acuerdo en que su conversión fue sincera y que es un miembro activo del Ejército de Salvación en Suiza.
M.A.M. basó entonces su solicitud de asilo en el hecho de que los conversos del islam al cristianismo pueden ser fácilmente acusados de blasfemia y detenidos por un delito que se castiga con la pena de muerte según la legislación pakistaní. Incluso cuando no son detenidos y condenados, los conversos pueden ser asesinados por sus familiares, que luego son declarados inocentes por los tribunales o reciben condenas muy leves. En el caso de M.A.M., el hecho de que su hermano fuera imán hacía que el riesgo fuera aún mayor.
Las autoridades y los jueces suizos, hasta una decisión del Tribunal Administrativo Federal del 2 de junio de 2020, rechazaron la solicitud de asilo. Examinaron varios documentos COI (Country of Origin Information) sobre Pakistán, y concluyeron que el cristianismo no está prohibido en el país y que no hay una persecución general de los cristianos allí. En cuanto a la blasfemia, interpretaron la ley paquistaní en el sentido de que el delito sólo lo cometen quienes insultan o menosprecian públicamente el Islam, lo que no era el caso de M.A.M.
M.A.M. contó con el apoyo de ADF (Alliance Defending Freedom), el Centro Europeo para el Derecho y la Justicia (ECLJ) y Ordo Iuris - Instituto de Cultura Jurídica en su recurso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Este último examinó la COI y los documentos relativos a las leyes sobre la blasfemia y la situación de los conversos del Islam al cristianismo en Pakistán, incluida la resolución del Parlamento Europeo de 29 de abril de 2021 sobre las leyes relativas a la blasfemia en Pakistán y la "Country Policy and Information Note-Pakistan: Cristianos y cristianos conversos" de febrero de 2021. Estos documentos se publicaron después de la decisión del Tribunal Administrativo Federal suizo de 2020, pero describen una situación que existía mucho antes.
El Tribunal Europeo concluyó que las autoridades y los tribunales suizos habían centrado su atención en la situación de los cristianos en Pakistán en general, pero no examinaron la situación específica de los cristianos conversos del Islam. En efecto, corren el riesgo de ser ejecutados en virtud de las leyes sobre la blasfemia, ya que las acusaciones de ofensa al Islam son a menudo inventadas, o de ser asesinados por sus familiares.
Por estas razones, el Tribunal Europeo, que no tiene competencias para conceder asilo, bloqueó la deportación de M.A.M. a Pakistán y pidió a Suiza que reconsiderara su solicitud de asilo teniendo en cuenta los principios establecidos en la decisión europea.
La decisión golpea tanto a Pakistán como a las políticas de asilo restrictivas que prevalecen en Suiza. Ya el 27 de julio de 2021, el Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura había fallado en contra de Suiza tras denegar el asilo a un miembro de la Iglesia de Dios Todopoderoso que había escapado de China, declarando que los cristianos en general corren el riesgo de ser perseguidos y torturados en China, a menos que pertenezcan a la Iglesia de los Tres Yoes, controlada por el gobierno, y a la Iglesia Católica Patriótica.