El virus se originó «probablemente» en un laboratorio de Wuhan, admite un experto de la OMS

17 de agosto de 2021

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El mismo Dr. Embarek que llevó a los expertos de la OMS a Wuhan y descartó la teoría dice ahora en una sorprendente entrevista que ha cambiado de opinión.
 
Fue el 12 de agosto, y la televisión danesa TV2, propiedad del gobierno, lanzó una bomba cuya onda expansiva China trató de detener inmediatamente.
 
Los lectores de Bitter Winter recordarán nuestras críticas al experto jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) danesa, el Dr. Peter Ben Embarek, que dirigió la malograda expedición de la OMS a Wuhan y anunció al mundo en una conferencia de prensa que el equipo de la OMS creía que era " extremadamente improbable " que el virus COVID-19 se hubiera originado en un laboratorio chino, porque los científicos del Partido Comunista Chino (PCCh) así se lo habían informado.
 
Tratamos al Dr. Embarek con dureza. En aras de la equidad, ahora le aplaudimos por haber admitido en su televisión nacional que se equivocó, o más bien que aceptó un dictado realizado por los chinos.
 
Embarek declaró a TV2 que la pandemia "bien puede haber sido iniciada por un empleado de uno de los laboratorios de la ciudad que se haya infectado con un murciélago durante el trabajo de campo o en uno de los laboratorios de Wuhan".
 
Mientras que el informe de la OMS sobre Wuhan describe la teoría del origen en el laboratorio como "extremadamente improbable", ahora Embarek la calificó de "probable" y "un escenario probable".
 
Embarek mantuvo que no se equivocó cuando dijo al mundo que el virus se originó con los murciélagos. Sin embargo, ahora cree que un "empleado de laboratorio" que trabajaba con murciélagos fue el probable "paciente cero" de COVID-19.
 
Es importante señalar que Embarek no dijo (ni Bitter Winter argumentó nunca) que el virus fuera producido y propagado deliberadamente por el PCC. Lo que Embarek (y Bitter Winter) argumentan es que fue un error cometido por uno o más empleados de un laboratorio de Wuhan, pero uno que creó al menos cuatro millones de víctimas, destruyó economías nacionales enteras y cambió todas nuestras vidas de forma dramática. Lo que fue y sigue siendo deliberado es el extraordinario esfuerzo realizado por el Partido Comunista Chino para ocultar la verdad.
 
Embarek sostiene ahora (como hicieron otros mucho antes de su viaje a Wuhan) que el murciélago del que se sabe que ha transmitido el coronavirus a los humanos es el llamado murciélago de herradura, y que el problema es que "ninguno de ese tipo de murciélago de herradura vive al aire libre en la zona de Wuhan, y las únicas personas de las que se sabe que han estado cerca de murciélagos de herradura son los empleados de los laboratorios de la ciudad".
 
Embarek reveló que los expertos de la OMS visitaron dos laboratorios en Wuhan, y creen que ambos habían trabajado con murciélagos de herradura. "No llegamos a ver los libros o documentos del laboratorio directamente. Recibimos una presentación, y luego hablamos e hicimos las preguntas que queríamos hacer, pero no llegamos a ver ninguna documentación en absoluto", dijo Embarek a TV2.
 
Aunque el laboratorio del Instituto de Virología de Wuhan ha sido el que más atención ha recibido, Embarek dijo que el segundo laboratorio, operado por el Centro de Control de Enfermedades de China, también debe ser considerado. "Su última publicación sobre el trabajo con murciélagos fue de 2013, pero eso no significa que no hayan trabajado con murciélagos desde entonces. Por lo que tenemos entendido, trabajan sobre todo con parásitos, y no tanto con virus, pero eso también significa que trabajan con parásitos de murciélagos", dijo Embarek.
 
Informó de que, durante la visita, preguntó a los chinos: "¿Cuántos años tiene este laboratorio?". Le respondieron: "Es de diciembre de 2019. Allí, nos trasladamos a estos nuevos laboratorios el 2 de diciembre de 2019". "Es interesante que el laboratorio se haya trasladado el 2 de diciembre de 2019, comentó Embarek. Este es el período en el que comenzó todo, y usted sabe que cuando se mueve un laboratorio, es disruptivo para todo. También hay que trasladar la recogida de virus, la recogida de muestras y otras colecciones de un lugar a otro. Todo el procedimiento es siempre un elemento perturbador en el flujo de trabajo diario de un laboratorio, así que en algún momento también será interesante analizar ese periodo y este laboratorio".
 
Pero eso puede resultar imposible, porque los chinos no permitieron entonces y probablemente no permitirán en el futuro una verdadera "investigación". "Al principio, añadió Embarek, no querían que escribiéramos nada sobre la teoría del laboratorio. Decían que un origen de laboratorio era imposible, y que por tanto no había que perder el tiempo en ello", añadió Embarek. Al final, los chinos les permitieron incluir una referencia a la teoría del laboratorio, pero sólo declarándola "extremadamente improbable". Esta conclusión se alcanzó tras horas de negociaciones, dijo Embarek. "Probablemente sea porque significa que hay un error humano detrás de tal incidente, y no están muy contentos de admitirlo. En parte está el sentimiento tradicional asiático de no perder la cara, y además todo el sistema se centra mucho en que China es infalible y que todo debe ser perfecto. También puede ser que alguien quiera ocultar algo. ¿Quién sabe?"
 
Lo que sabemos sobre el origen del COVID-19, dijo el científico danés, es que se originó con murciélagos en Wuhan, y que los murciélagos concretos identificados como responsables no vagan libremente por Wuhan fuera de los laboratorios.
 
Para probar de forma concluyente, pero también para refutar, la teoría del laboratorio, la OMS debería recibir "un nivel de cooperación completamente diferente por parte de los chinos", dijo el científico. "Habría que revisar los libros de seguridad, los libros de laboratorio, los planes de investigación y las colecciones biológicas. Se revisa todo y se entrevista a todos los empleados por separado".
 
La OMS solicita ahora una segunda misión a Wuhan, y el acceso total a estos datos. China ya ha respondido negativamente, y ha intensificado la propaganda afirmando que el COVID-19 fue producido artificialmente por Estados Unidos en el laboratorio militar de Fort Detrick.
 
La bomba lanzada por Embarek ha explotado. Sus implicaciones son enormes. Incluso la OMS, amiga de China, reconoce ahora que la teoría del origen en el laboratorio es "probable". Esto equivale a admitir que el eslogan "China mintió, millones murieron" refleja "probablemente" la verdad. Lo increíble, más que la teoría del laboratorio es que el mundo parece estar ocupado en cosas menos importantes que hacer responsable a China de más de cuatro millones de víctimas y de la peor catástrofe que ha afectado a nuestras vidas y a nuestras economías en el último siglo.
 
 

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