En mi experiencia en el trabajo con personas que experimentan atracción al mismo sexo (AMS) observo rasgos y aspectos similares. Constato que existe una tónica generalizada, por supuesto caben las excepciones.
“Vivir liberados, no oprimidos”, este es el eco incesante de una sociedad impersonal que da como solución y pinta como panacea una opción unilateral y que a la vez es portadora de un estigma social como actualmente sigue siendo la homosexualidad. No nos engañemos.
¿Qué le mueve a una persona con AMS a querer dejar su homosexualidad?
Pueden ser diferentes detonantes o causas. Nombro las que seguramente son más comunes:
- La insatisfacción personal que se experimenta, el hastío profundo que no sacia, la búsqueda a veces sistemática y desesperada por encontrar experiencias que finalmente no llenan.
- Un constante conflicto con las creencias personales. No me estoy refiriendo solamente a creencias religiosas o morales, sino a su realidad intrínseca. Es complicado vivir lo que no uno no es.
Primeramente si quieres dejar tu homosexualidad es porque ya conoces que hay otra alternativa. Ya sabes que a través de una terapia reparativa o de cambio puedes “reiniciar” tu identidad. Volver a ser lo que eras inicialmente: un hombre o una mujer heterosexual.
En segundo lugar es importante reconocer tus miedos, identificarlos, ponerles nombre para poder gestionarlos. Ya sabemos que el miedo paraliza la acción.
- Miedo a ti mismo, temor a expresar por escrito o escuchar de tu propia voz algo referente al estigma que llevas dentro y en silencio porque creías que no tenía solución.
- Miedo a comunicar a amigos y familiares que ya te conocen como homosexual o lesbiana "salida del armario" incluso con pareja, que ahora deseas tomar otro rumbo en tu vida.
- Miedo y dudas sobre la terapia; si funcionará y obtendrás resultados.
- Miedo a sentirte solo, perdido, vacío, inseguro.
- Miedo a descubrirte a ti mismo.
En tercer lugar: Busca un terapeuta que esté especializado en la terapia reparativa, de cambio. Infórmate en qué consiste la terapia para poder tomar una decisión firme. No olvidemos que lo que vale en la vida, cuesta.
Me dan la oportunidad de admirar, no sin dolor a veces, la lucha decidida de cada uno de ellos/as contra el estigma que viven.
Si tienes preguntas, comentarios o estás interesado/a en la terapia puedes ponerte en contacto conmigo en: [email protected] (dirección privada y confidencial).