Italia: 1,29 millones de niños en la pobreza absoluta, revela el Istat
Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística de Italia (Istat) muestran que son las niñas, los niños y los adolescentes los más afectados por la pobreza en Italia. De hecho, hay 1,29 millones de niños en pobreza absoluta (13,8% del total), el valor más alto desde 2014, en comparación con el 9,7% de la población total. La incidencia de la pobreza infantil es más baja en el norte (12,9%) y más alta en el sur (15,9%), mientras que en el centro es del 13,1%.
"No podemos aceptar que las condiciones materiales creen una fractura tan profunda en nuestra sociedad y una mayor exacerbación de las desigualdades sociales: es esencial poner el tema de la pobreza infantil en el centro del debate público y de la atención del Gobierno y del Parlamento, especialmente en vísperas del inicio del examen de la ley presupuestaria", dice Giorgia D'Errico, directora de Asuntos Públicos de Save the Children.
Los valores más altos se registran en los niños de 4 a 6 años (14,8%) y de 7 a 13 años (14,5%), pero también son superiores a la media poblacional en el grupo de 0 a 3 años (13,4%) y en el grupo de 14 a 17 años (12,7%). Las familias en pobreza absoluta en las que hay menores de edad son casi 748 mil (12,4%). Entre los más afectados se encuentran los que tienen 3 o más hijos menores de edad (18,8%) y los hijos monoparentales (14,8%).
Las familias extranjeras con menores de edad son las que más han visto empeorar su situación respecto a 2022. De hecho, entre las familias con menores formadas únicamente por extranjeros, la pobreza afecta a poco más de 2 de cada 5 familias (41,4% frente al 36,1% en 2022), y entre las que tienen extranjeros, la pobreza se sitúa en el 34,1% (era del 30,7% en 2022) mientras que entre las familias con menores solo italianos el valor es de 8, 2% (fue 7,8% en 2022).
"Permisos más largos para los padres para fomentar el empleo y la reincorporación al trabajo de las madres después del nacimiento de un hijo y evitar así el riesgo de empobrecimiento de las familias junto con la crianza compartida; apoyo material continuo y regular a los nuevos padres para cubrir los gastos relacionados con la primera infancia y garantizar la igualdad de oportunidades de crecimiento para niños y niñas; los comedores y la escuela primaria a tiempo completo deben definirse y financiarse como niveles esenciales de rendimiento (LEP) para combatir la pobreza educativa y alimentaria: todas estas son herramientas fundamentales que no pueden faltar para una estrategia eficaz de prevención y combate a la pobreza en niños, niñas y adolescentes y sus familias", concluye D'Errico.
Save the Children pide la creación de un Fondo para la lucha contra la pobreza alimentaria de niños y niñas, destinado a los municipios que utilizan recursos de su presupuesto, para permitir el acceso gratuito al servicio de comedor a los estudiantes de primaria pertenecientes a familias en condiciones de dificultad económica. También es crucial que se garantice el permiso de paternidad y se amplíe a al menos 3 meses -para luego llegar a 5, al igual que el permiso de maternidad- a todos los trabajadores, no solo a los empleados; y que se aumente y amplíe en un 50% la asignación única y universal a todos los niños y niñas de 0 a 3 años, independientemente del número de hijos en la unidad familiar.
La pobreza que afecta a las niñas, niños y adolescentes en Italia es una grave injusticia: afecta a sus trayectorias educativas y de crecimiento, poniendo en riesgo sus oportunidades y penalizando sus expectativas de futuro. Según una investigación realizada por Save the Children, más de uno de cada cuatro adolescentes de entre 15 y 16 años con dificultades económicas (28,1%) dice que no terminará la escuela ni irá a trabajar, en comparación con el 8,9% de sus pares más ricos. El 67,4% de los adolescentes en condiciones de privación material temen que, incluso trabajando, no podrán ganar lo suficiente, en comparación con el 25,9% de sus pares más ricos; El 67,3% de no poder encontrar un trabajo decente, protegido de la explotación (frente al 35,8% de los grupos más ricos).