La poderosa oración que San Charbel rezó constantemente durante varios días de agonía

En sus 39 años de sacerdocio, cada día, el padre Charbel celebraba a las once la eucaristía, haciendo de esta el centro de su jornada. Ahí se sumergía en profunda contemplación del santo misterio, elevando un cántico de amor a su Bien amado: "¡Oh Jesús! Esplendor de la eterna gloria, consolador del alma exiliada, ante Ti no tengo palabras, y es mi silencio el que habla".

Celebró su última misa a la acostumbrada hora el 16 de diciembre de 1898.

Durante ocho días el ermitaño agonizó y pese a los sufrimientos, no dejó de continuar pronunciando la oración de la misa diaria que en su lecho de agonía ya no podía celebrar. El último día que la pronunció fue el 24 de diciembre, día de su pascua.

Aprende la oración que San Charbel recitó constantemente durante su agonía. Rézala con fe, porque es un valioso recurso para todos. Es realmente una oración muy conmovedora...

La última oración de San Charbel

"Oh Padre de la Verdad, aquí tienes a Tu Hijo que se sacrifica para complacerte. Acepta Su muerte por mí. Gracias a ella, seré indultado. Aquí está el sacrificio. Recíbelo de mis manos y olvida las faltas que he cometido ante tu Majestad. Esta es la sangre que floreció en el Calvario por mi salvación y apela ante ti en mi favor. Considerando sus méritos, acepta mi ofrenda. Tengo muchos pecados en mi conciencia, pero grande es Tu misericordia. Si los pones en la balanza, tu bondad pesará más que las montañas más grandes. No consideres mis pecados, sino lo que ha sido sacrificado por ellos. Tu Bien amado sufrió el tormento de los clavos, de la lanza, y sus sufrimientos bastaron para satisfacerte y salvarnos. Gloria al Padre que envió a su Hijo por nosotros. Alabado sea el Hijo que nos ha liberado y nos ha provisto de la salvación. Bendito sea Aquel que por Su amor dio vida a todos. A Él sea la gloria". Este es el texto completo de la última oración de San Charbel antes de su muerte. Las palabras que pronunció incesantemente durante su agonía de varios días fueron: "Oh Padre de la Verdad, aquí tienes a Tu Hijo que se sacrifica para complacerte ".

El cuerpo incorrupto de San Charbel permanece en el Monasterio Santo Maròn - Annaya. Pulsa aquí y hazle tu petición