En su prematura trayectoria profesional, David Henrie acumula una serie de reconocimientos que lo sindicaban como actor revelación de la industria juvenil movida por el gigante “Disney”. Con actuaciones en la serie norteamericana How I met your mother; y luego compartiendo roles protagónicos en la serie Los Hechiceros de Waverly Place, junto a la actriz y hoy conocida cantante de música pop, Selena Gómez; saltó inesperadamente a la fama rodeado de flashes y reconocimientos.
Con veinticinco años de edad, su inquieto espíritu lo llevó a tomar distancia de la etiqueta de chico Disney, para incursionar como director del cortometraje “Catch” buscando comunicar con él fe y valores que lo identifican.
El joven director aborda en Catch la historia de un niño de ocho años de edad que anhela ser estrella del Beisbol y debe doblegar a su propio padre para alcanzar su sueño… situación que es cercana a la historia vivida por el propio David.
“Siempre he querido contar historias inspiradoras, que tengan un gran impacto en la vida de otras personas, que te hacen querer ser una mejor persona, cambiar a tu comunidad y traer amor a tu familia -afirma en un podcast del sitio americano The Blaze, donde puntualiza…- Con este proyecto he querido empezar, es el tipo de historias que quiero contar por el resto de mi vida. Adoro las historias de padres e hijos y el jugar a la pelota significa más que aventársela. Es algo que la gente en América debe de recordar… lo importante que es pasar tiempo de calidad con sus hijos”.
Caminar la vida para ir hacia Dios
Nacido en la ciudad de Mission Viejo, California, David fue criado en el seno de una familia católica. Sin lujos, fue consciente del cómo sus padres se esmeraban en darle una educación de calidad. “Mi padre quería ofrecer un estilo de vida para mí y la familia, el mismo que nunca tuvo… por eso trabajó mucho, y él era un joven padre, a quien nadie le dio un manual de cómo actuar”.
Confidencia que durante esta etapa forjó una fe católica “tibia”, pero que aún así al pasar los años fue determinante para sus opciones de vida.
Hoy, a diferencia de muchos de sus pares en la industria, Henrie parece tener propósitos claros… que expresa sin rodeos. “Creo que nuestra generación sobre todo tiene un estigma extraño hacia las familias, al igual que la gente, quienes no desean tener hijos. Eso es raro, pues nuestra generación es la primera en la historia de nuestra humanidad que ha tenido este tipo de actitud frente al matrimonio, la familia y los niños”.
La pasión y novedad
En sus cortos años de trayectoria en la industria del cine ha visto rápidos ascensos, caídas y empeños infructuosos de muchos tras el éxito. Él navega en aguas turbulentas y lo reconoce. “No es fácil debido a las constantes tentaciones… he sido afortunado de tener amigos que no están en el negocio, que no son proclives al loco estilo de vida que puede ir de la mano con Hollywood…”
En entrevista publicada por Movieguide.org al estrenar el cortometraje Catch, David reconoce su amor por el arte que expresa la presencia de Dios… “Desde el principio de los tiempos, el arte se ha utilizado para tocar las fibras del corazón de la humanidad. Creo que ese es el potencial que tiene el arte. Mira el Vaticano. Algunas de las más grandes obras de arte se encuentran allí. Los grandes artistas siempre han sido personas que intentan tocar los cielos y recrear eso en una imagen. Creo que el arte tiene el poder de elevarte hacia Dios para inspirar el cambio y la esperanza…”.