Cada mes el Papa Francisco convoca a los cristianos a orar por una intención concreta que -entre otros medios- también comunica a través de un vídeo.
Para este mes de agosto de 2021 el Santo Padre pide que “recemos por la Iglesia, para que reciba del Espíritu Santo la gracia y la fuerza para reformarse a la luz del Evangelio”.
En su reflexión el Pontífice inicia recordando que “solo podemos renovar la Iglesia desde el discernimiento de la voluntad de Dios en nuestra vida diaria”.
Así entonces, explica, la reforma de la Iglesia inicia “con una reforma de nosotros mismos” e insiste explicando de que se trata esta reforma: “Dejar que el Espíritu Santo que es el don de Dios en nuestros corazones, nos recuerde lo que Jesús enseñó y nos ayude a ponerlo en práctica”
“Sueño” -confidencia el Papa Francisco- “con una opción aún más misionera, que salga al encuentro del otro sin proselitismo y que transforme todas sus estructuras para la evangelización del mudo actual”.