San Bernabé y San Pablo fueron los evangelizadores de Chipre, donde llegaron juntos en el año 46, y de Grecia, tierra de arraigada fe. Dos figuras imponentes, firmes en la fe y fuertes en la amistad, en nombre de Cristo. Por lo tanto, es en sus pasos misioneros que el Papa Francisco se pone en marcha, siguiendo su ejemplo como predicadores del Evangelio en dos países que idealmente unen Oriente y Occidente. Como señaló el Pontífice en la Audiencia General de este miércoles 1° de diciembre, lo que comienza hoy "será un viaje a las fuentes de la fe apostólica y de la fraternidad entre los cristianos de diversas confesiones".
El viaje del Pontífice a Chipre y Grecia pone de nuevo el foco sobre la difícil situación de los migrantes en las fronteras europeas y la desconexión entre su llamado evangélico a los países para que los reciban e integren y los gobiernos de primera línea que tienen cada vez menos disposición o capacidad para dejarles entrar.
Como un signo de su mensaje el Papa Francisco visitará Lesbos, donde en 2016 acaparó titulares al llevarse de vuelta a Italia con él a una docena de sirios que vivían en un campamento en la isla griega.
El Vicario de Cristo -según informa la agencia AP de noticias- "está organizando una operación similar para esta ocasión: en Chipre se han identificado unos 50 migrantes para su traslado a Italia, aunque no viajarán con el Pontífice, sino que serán reubicados en las próximas semanas, explicaron las autoridades chipriotas. El Vaticano no descartó que en Lesbos pueda ocurrir lo mismo".
Desafíos del viaje apostólico
El lema de la parada pontificia en Chipre es "Consuélanos en la fe", inspirado en el nombre de San Bernabé, que puede significar "hijo de la consolación". Luego, el lema del viaje apostólico a Grecia es "Abrámonos cada vez más a las sorpresas de Dios". La frase está tomada del mensaje del Papa para la 36ª Jornada Mundial de la Juventud, celebrada el pasado 21 de noviembre, y que en su versión completa dice: "Abrámonos a las sorpresas de Dios, que quiere iluminar nuestro camino". La llamada a la esperanza es evidente: como explica una nota oficial, "en un momento en el que se sienten las consecuencias de la pandemia y de la reciente crisis financiera, se expresa la esperanza de que la visita del Papa aporte un rayo de luz para el futuro de Grecia".
Fuentes: Vatican News, AP