El 24 de junio de 1981 comenzó una historia muy importante: en una aldea desconocida de los Balcanes - Medjugorje – donde seis niños dijeron que habían visto, y aún, transcurridos 33 años, dicen que ven a la Santísima Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra… quien se les presenta como la “Reina de la Paz”.
El Misterio que será develado
El diácono Goo se crió en un hogar católico de su natal Corea, pero tras la secundaria que completó en Port Moody, comenzó a experimentar dudas que arrojaron sombras sobre su fe.
Mientras estudiaba en la Universidad de Waterloo, conoció a un Protestante cuya devoción le animó a buscar a Dios de nuevo. Empezó a leer la Biblia que este amigo modélico le entregó, orando todos los días y asistiendo a los servicios litúrgicos protestantes.
Se mudó a Seattle por trabajo y allí, casualmente, llegó a sus manos hace seis años un libro sobre las apariciones marianas en Medjugorje “y me inspiró tanto que decidí viajar a esa aldea de Bosnia-Herzegovina”.
"Fue durante esa peregrinación que inicié mi regreso a la Iglesia y luego, pocas semanas después del viaje, empecé a tomar conciencia de que me sentía llamado al sacerdocio". Paul Goo entraría al seminario un año después. "Sinceramente, creo que fue la Virgen, la Reina de la Paz, quien me llevó a Jesús", confiesa.
Ahora que ha dado un paso más en su camino hacia el sacerdocio, su padre, Frank Goo, también valora el testimonio de su hijo, cuya conversión y vocación sacerdotal nacieron en Medjugorje... "El mundo está sufriendo. Los jóvenes no saben de nuestro Dios, y ellos no están interesados en la fe. Necesitamos buenos sacerdotes jóvenes que sean modelo para los jóvenes".